Al verlos juntos, surge, con la rapidez de lo espontáneo, el refranero: "Dios los cría y ellos se juntan". La imagen es de diciembre de 2009, y aunó a tres forajidos:
a) Roberto Baradel, autoproclamado "docente" y uno de los instigadores de la mentada "Marcha Federal" de hace unos días atrás. Sempiterno agitador ligado a ideologías de izquierda que viaja en avión hacia destinos europeos;
b) Milagro Sala, hoy procesada y detenida por delincuente y estafadora al servicio del kirchnerismo en la Provincia de Jujuy;
c) Luis Ángel D'Elìa, piquetero que como funcionario del entonces Gobernador bonaerense Felipe Solá, en el año 2006, cobraba un 'sueldito' de $ 13.585,20 -una fortuna-. Todavía la Justicia debe investigarlo por destrozar la Comisaría 24a. de la Policía Federal Argentina (PFA) ubicada en La Boca, en 2004. El delincuente D'Elía espetó a comienzos de abril de 2016: "Perón hoy se llama Cristina Fernández de Kirchner y si la meten presa condenan nuestro futuro". Pues, que la metan presa, agrego.
d) Aparece un cuarto en la galería del terror: Hugo Yasky, otro forajido que contribuyó a formar, en julio de 2012, y por ser secretario general de la CTA, el Sindicato Único de Trabajadores Privados de la Libertad Ambulatoria (SUTPLA). En resumidas palabras: si usted delinque y está preso, tiene "derecho", gracias a Yasky -y a los fondos estatales/nuestros- a percibir un sueldo de $ 4400 mensuales (estos valores corrían en el año predicho, seguro se ajustaron con la inflación).
¡MEMORIA!
Por Gabriel O. Turone